Fernando Marcet Manrique
Si alguien te propusiera formar parte de una asociación ecologista, si te plantearan dedicar buena parte de tu tiempo a eso que la gente llama “ecologismo”, ¿tú que dirías? Seguramente, si te consideras una persona pragmática, con los pies en el suelo, contestarías algo así como que “eso no va contigo”. Tú asocias ecologismo a las típicas fantasías de juventud. Luchar contra el sistema, querencia enfermiza hacia los árboles y los bichitos en general, el “no” como norma, la religión de los hippies, quemar cajeros automáticos y hamburgueserías, vivir en comunidades, hacer nudismo, desapego hacia todo lo material y escribir poesía. Todo eso es para ti el ecologismo, y a ti el rollo ese no te va un pelo. Ellos quieren ir en carro, tú prefieres ir en coche, así que por ti se pueden quedar con su ecologismo y seguir yendo en carro, a ver si les cunde. Continuar leyendo »